En primer lugar, me gustaría ofrecer alguna información sobre lo que significa el elefante para el reino de Siam, donde han sido venerados durante más de 5000 años.
El elefante (ช้าง-chang- en tailandés) ha sido símbolo nacional de Tailandia, su historia y sus costumbres, venerado desde hace más de 5000 años, símbolo de la realeza y la prosperidad del país.
El elefante asiático es una especie protegida en peligro de extinción,cuya población se estima en torno a unos 2500 ejemplares en estado salvaje y 3000 en cautividad, número que se ha visto drásticamente reducido desde 1850 (unos 100.000 individuos).
Durante siglos, los elefantes se han empleados en las guerras, para el transporte de cargas pesadas o realizar trabajos en el campo. Es a partir de 1989, cuando, tras la prohibición de realizar trabajos forzados en el campo, común en el pasado, la mayoría de ellos han sido capturados para su uso en espectáculos, orfanatos o santuarios (en la mayoría de ocasiones son tratados de manera brutal para educarlos y conseguir que realicen tareas para uso lucrativo).
En Tailandia existen gran número de centros que bajo la premisa de ser centros de conservación se dedican a la explotación de los elefantes con fines lucrativos, realizando paseos para las personas, actuaciones o pinturas. Muchos de ellos capturados en la naturaleza y separados de sus madres para comenzar el proceso de educación cuando antes.
· Mi visita y opinión personal del “THAI ELEPHANT CONSERVATION CENTER” (LAMPANG, THAILAND):
Visitando el entorno del centro de conservación pude apreciar que las instalaciones son de gran tamaño, situadas en el medio natural y provisto de centro de cuidados de los animales (enfermería), una guardería, un centro de investigación y el lugar donde se alojan los propios elefantes junto a los mahouts.
En la enfermería, pudimos asistir a los cuidados y tratamientos que ofrecían al elefante más adulto que habita en el centro, una hembra que cuenta con más de 60 años que había sufrido una herida en la pata.
Según he podido observar, los animales parecen están bien cuidados aunque si me sorprendió el hecho de que realizaran un par de espectáculos al día donde se exhiben las capacidades de los elefantes e incluso un par de ellos realizaban alguna pintura (lo cual requiere el maltrato del animal para el aprendizaje de todo el proceso).
Desde aquí me gustaría intentar concienciar a las personas que quieran viajar a Tailandia y conocer a los elefantes, que es necesario por parte de todos el realizar un turismo sostenible e intentar informarse un poco previamente para no contribuir con los numerosos casos de explotación que se dan hacia los elefantes.
Referencias: